En qué consiste la liberación de tortuguitas
by Sarah Kaminski | Mar 21, 2022
“Liberar tortugas”. Seguramente has escuchado la frase en más de una ocasión pero, ¿sabes exactamente de qué se trata esta actividad eco turística? Siete de las ocho especies de tortugas marinas que existen en el mundo llegan a costas mexicanas a depositar sus huevos. Este fenómeno ocurre tanto en el Pacífico como en ciertas partes del Golfo y el Caribe.
¿Cómo ocurre este proceso?
Las tortugas hembras buscan un buen lugar para hacer un nido, el cual crean cavando un hoyo de unos 40 a 50 centímetros de profundidad. Una vez hecho el nido, depositan sus huevos fecundados en él y los cubren con arena.
Aproximadamente dos meses después, las tortugas bebés rompen el cascarón y comienzan a empujar la arena para salir a la superficie. Un porcentaje minúsculo de tortugas logra salir a la superficie. Esto es porque la gran mayoría son capturadas por depredadores, de entre los cuales el principal es el ser humano.
Aquellas que lo logran tienen que enfrentar otros riesgos en su camino a la adultez, al grado en que apenas dos o tres de 100 llegarán a la madurez. La idea de liberar tortugas es facilitar su viaje a la superficie y después al mar, aumentando así las probabilidades de que sobrevivan. Es una labor importante, ya que varias de estas especies se encuentran amenazadas o incluso en peligro de extinción. La liberación tiene lugar todos los días cerca del atardecer, aproximadamente a las 17:00 horas. Debido a la naturaleza de la actividad, es ideal para personas de todas las edades y la puedes compartir en familia, con amigos o pareja.
¿Cómo liberar Tortugas Marinas?
Inicialmente recibirás una plática por parte de los encargados. Ahí podrá aprender más sobre esta especie marina, cuyo nombre científico es Lepidochelys olivacea. Hasta hace unos años, los nidos de tortugas eran comunes en las costas oaxaqueñas. Sin embargo, debido a la cultura gastronómica de la región, así como a los depredadores naturales, la especie se puso en peligro.
En edad adulta, una tortuga puede llegar a medir hasta 67 centímetros y pesar casi 100 kilogramos. Por temporada, una hembra pone entre 80 y 150 huevos. Entre más alta sea la temperatura, mayor es la probabilidad de que nazcan hembras de los huevos.
Una vez que te designen tu tortuga, puedes optar por ponerle un nombre. La recién nacida te será entregada en una jícara. Debes de tener cuidado de no tirarla y de que no tenga contacto con tu cuerpo, ya que podrías contaminar su saco vitelo, una reserva de nutrientes que poseen en su pecho. Si se infecta, tu tortuga podría morir.
¡A liberar tortugas recién nacidas!
Tras acercarte unos metros a la playa, deberás poner tu pequeña tortuga en la arena. ¡No te apresures!, las tortugas recién nacidas saben llegar al mar gracias al sonido de las olas. Sin embargo, existe un primer peligro latente: las gaviotas. Así que los primero minutos de la vida en libertad de la pequeña golfina serán puestos a prueba (como todas las vidas). No todos los ejemplares llegan al mar, por lo que tienes que estar consciente de que en la naturaleza se vive lo más bello y lo más salvaje.
Sin embargo, si tu tortuga llega al mar podrás apreciar el inicio de una posible larga vida, ya que las tortugas golfinas pueden vivir por lo menos 50 años. Por si fuera poco, se trata de animales filopátricos, por lo que puedes estar seguro de que volverá algún día a la playa en que la liberaste para reproducirse, y así multiplicar el ciclo vital en el cual fuiste parte.